
Hay sueños tan frágiles, que no soportan la transformación en una realidad...se desintegran en la atmósfera, no toleran la aspereza de lo real, y los delicados hilos que los tejen se enganchan en las aristas de la razón tajante, de los trajes grises y de los edificios tristes y ahumados; se horadan, se rajan, se ensucian, para finalmente llegar a nosotros...hechos pedazos.
Hay que atesorar esos sueños como lo que son, una ilusión...guardarlos donde nada los toque, y no perderlos por tratar de poseerlos...
profundamente pronfundo e verdadeiramente verdadeiro...
ResponderExcluirTe dolu lu lu lu lu!!